domingo, mayo 10, 2009
La histeria de los tiburones
Los tiburones son unos monstruos marinos que atacan a cualquier persona que pillan, con malicia, sin avisar. O eso es lo que nos enseñan en las películas y todos esos programas de aventuras. Siempre que un tiburón ataca a un bañista salen las noticias en todas partes, y empieza la histeria colectiva.
Hace unos meses un tiburón atacó a un submarinista de la marina australiana en el puerto de Sidney, y la semana siguiente otro atacó a un bañista en una de las playas de la ciudad. La coincidencia de estos dos ataques desencadenó toda una histeria colectiva, cerrando playas por aquí y por allá, y sacando fotos de tiburones amenazando a bañistas.
Esta ronda de "ataques" me sorprendió cuando estaba a punto de participar en una de esas carreras de natación que tanto me gustan. Era un día gris y tormentoso, y el mar estaba tan revoltoso que lo último que me preocupaban eran los tiburones. Los medios de comunicación de repente se interesaron por estas carreras, y había cámaras y entrevistadores con la consabida pregunta, "¿y tú no tienes miedo de los tiburones?". Ellos no sabían que el fin de semana anterior estuve buceando en un lugar llamado "shark point", donde fuimos a una cueva a observar a un grupo de tiburones. Y ese "shark point" estaba a apenas unos cinco kilómetros de la salida de la carrera... Al final tuvieron que cambiar el recorrido de la carrera, no por los tiburones sino por el estado del mar. Fue una carrera muy emocionante por las criaturas marinas que habían traído la tormenta, unos bichos extraños en cantidades enormes, miles y miles, cadáveres que llenaban la bahía, seres que a algunos se les antojaba aliens, y a otros, siguiendo la moda de la histeria, embriones de tiburones, y como decían... "si hay tantos embriones de tiburones muertos, cuántos tiburones vivos nos esperan en el mar...?".
La presencia de los medios de "desinformación" se hizo crónica, siempre había alguien con cámara lista a ver si aparece alguna amenaza de tiburones, e incluso había helicópteros sobrevolando... tal vez para proteger a los bañistas, o más bien para ser los primeros en dar la noticia si pasa algo... algo que nunca pasó. Pero me alegró ver las noticias en los periódicos y en la tele con el tema de "esta gente aguerrida (loca?) sigue desafiando a los tiburones". Siempre es bueno ver propaganda de esta actividad, por extraña que sea.
Mientras, yo he seguido yendo en búsqueda de tiburones, que haberlos haylos, y en cantidad. La semana pasada, en una inmersión que hice con los Macquanautas, el grupo de submarinistas de Macquarie University, nos encontramos con un grupo de más de diez tiburones, algunos de más de dos metros, que nos rodearon mientras nosotros disfrutábamos del espectátulo. Precisamente en esos momentos había una carrera de natación, y apenas unos minutos antes estábamos viendo a los nadadores atravesando la superficie a toda velocidad, sin saber lo que pasaba debajo de ellos.
Hoy mismo he hecho otra visita a los tiburones, otra vez con los Macquanautas. Esta vez los tiburones se han acercado más, y Jay, de nuestro grupo, se ha emocionado tanto haciendo fotos que hasta se olvidaba de controlar su profundidad mientras tomaba las fotos. Incluyo una de sus fotos.
Es curioso, el tiburón de la foto da más miedo en la foto que en realidad. Los tiburones son peces como otros cualquiera. Hay que tratarlos con respeto, pero bueno al fin y al cabo hay que respetar todas las formas de vida, ¿no?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)